EL NIÑO IMPRUDENTE

*** Érase una vez un niño llamado Javier. Vivía en el campo con sus abuelos., A Javier le gustaban muchos los animales, pero como era muy imprudente, los abuelos temían que le sucediera algo.

Un día Javier no les hizo caso a los abuelos. Fue al establo y se puso a jugar tirando de la cola a los caballos. De repente, Javier sintió un fuerte golpe en la pierna. Fue tan fuerte que se puso a llorar.

Los abuelos escucharon a Javier y le sacaron del establo. Pronto se le curó la herida y ya dejó de hacer travesuras. (BENJAMÍN)

*** Érase una vez un niño que era muy imprudente.

Un día vio un león, se quedó en el mismo sitio y cuando el león se tiró a por él, tuvo que salir corriendo. Otro día se subió a un muro que estaba a punto de caerse. Su padre lo bajó. Más tarde, se metió en el mar, pese a que había marea muy alta y con muchas olas. Al final lo sacó un socorrista.

Por todo lo que le ocurrió aprendió a obedecer a los mayores, a respetar las normas y a no hacer cosas peligrosas. (JOSE PABLO)

*** Érase una vez un niño que se llamaba Jesús. Enchufaba la Play descalzo, se subía a sitios altos y cruzaba la calle sin mirar.

Los padres le regañaban mucho pero él no hacía caso. Los profesores le regañaban pero tampoco les obedecía.

Hasta que un día se cayó de una verja. Se hizo tal daño que tuvieron que ir al médico. Por suerte sólo se hizo un chichón. Jesús nunca jamás volvió a ser tan imprudente. (MIGUEL ÁNGEL FERNÁNDEZ).